Cuando hablamos de ortodoncias, lo primero que se nos viene a la cabeza es la posibilidad de alinear nuestros dientes y de conseguir una bonita sonrisa, no obstante, estas no son las únicas ventajas que nos proporciona este tipo de tratamiento odontológico.

Entre otras ventajas, el llevar una ortodoncia le permite al paciente masticar más correctamente, mejorar su proceso digestivo y, aunque a veces parezca que es “al revés”, también facilita una correcta vocalización y pronunciación de las palabras.

Sin olvidarnos de la cuestión estética, completamente relacionada con el fortalecimiento de nuestra autoestima. Y es que no hay duda de que tener nuestros dientes alineados y bien colocados nos anima a sonreír más y, con ello, a sentirnos más seguros de nosotros mismos.

Masticar  bien y hacer una buena digestión están directamente relacionados

Cuando tenemos los dientes correctamente colocados, podemos masticar adecuadamente, al coincidir perfectamente los dientes de arriba con los de abajo, es decir, tenemos una mordida mucho más precisa y eficiente.

Si masticamos mejor los alimentos, estos entrarán a nuestro sistema digestivo en trozos mucho más pequeños y fáciles de asimilar por nuestro organismo, por tanto, no cabe duda de que masticar bien facilita el proceso de digestión.

El proceso digestivo es fundamental para contar con una “salud de hierro”, ya que de este proceso conseguimos las vitaminas y nutrientes esenciales para nuestro organismo. Por tanto, cuanto mejor podamos asimilar los alimentos que digerimos, mejor podremos absorber todos estos nutrientes e, indudablemente, estaremos más sanos.

Así que ya sabes: si necesitabas una buena razón por la que empezar a usar una ortodoncia, ya la tienes. Contacta con Clínica Dental Cuadrado e infórmate de todas las opciones que ponemos a tu disposición. ¡No te arrepentirás!