A lo largo de nuestra vida, sobre todo cuando ya comenzamos a tener cierta edad, se suceden diferentes situaciones en las que nos podemos ver en la tesitura de tener que empezar a utilizar implantes dentales.

Hoy en día, de hecho, usar implantes dentales es una práctica de lo más habitual dentro de nuestra sociedad, con lo que no debemos de tener ningún tipo de duda o “complejo” a la hora de empezar a usarlos.

Quizá la mayor duda con la que se encuentran las personas que deciden comenzar a usar implantes dentales, es decidir si van a optar por usar implantes fijos, removibles o una combinación de ambas opciones.

Sigue leyendo para obtener más información sobre cualquiera de estas opciones.

Implantes dentales fijos

En este tipo de implantes, el diente artificial empleado se atornilla o se cementa de forma permanente sobre un pilar colocado en el hueco de la boca en el que vamos a ubicar este implante dental individual.

El diente colocado no se puede retirar, con las ventajas e inconvenientes que este hecho puede conllevar. Por ejemplo, no se puede quitar para realizar una mayor limpieza bucal, ni tampoco para dormir más cómodamente.

En la mayoría de estos casos, la corona escogida se fija a su propio implante dental, no obstante, como los implantes de este tipo son bastante fuertes, es posible reemplazar varios dientes con un solo implante, siempre que se conecten juntos.

Implantes dentales removibles

Este tipo de implantes es parecido a una dentadura removible estándar, de hecho, puede tratarse de una dentadura parcial o completa.

Normalmente, este implante está formado por dientes blancos artificiales rodeados de una encía plástica rosada. Para colocarlo adecuadamente, se coloca previamente una estructura metálica que se fija firmemente al pilar y sobre ella se engancha el implante.

Este sistema permite encajar el implante dental de una forma segura en su ubicación final pero, al contrario de lo que ocurre con los implantes fijos, se puede extraer o retirar fácilmente, ya sea para poder limpiarlo de una manera más óptima o para realizar cualquier tipo de ajuste o reparación.

Consulta a tu dentista de confianza para tomar la mejor decisión

Ante la pregunta de cuáles debemos elegir, la realidad es que no existe una respuesta general sino que cada caso debe ser estudiado y evaluado en su totalidad por un profesional que sea el que tome la decisión final junto al propio paciente.

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