No se habla de otra cosa dentro del sector odontólogico de nuestro país: el escándalo de las clínicas iDental, conocidas como clínicas dentales “low cost” (“bajo coste” en inglés) y cuyo público potencial eran pacientes con un poder adquisitivo medio o bajo.

Se ha demostrado que dicho grupo empresarial empleaba técnicas de marketing muy agresivas a la hora de captar a este tipo de pacientes, prometiéndoles tratamientos odontológicos muy baratos gracias a supuestas subvenciones de las que éstos podrían beneficiarse.

No se conocen las cifras exactas pero se habla de decenas de miles de personas estafadas, a falta de dar por finalizada la investigación oficial en la que se han registrado clínicas iDental de todo el país, confiscando principalmente documentación societaria e historiales clínicos que demuestran esta presunta macroestafa, una de las mayores en la historia reciente de nuestro país.

Se habla de delitos contra la salud pública, de administración fraudulenta, estafa, apropiación indebida, falsedad documental, y lesiones, entre otros muchos cargos, a falta de que salga a la luz la resolución definitiva sobre este caso.

El mayor escándalo odontológico de la historia de España (y uno de los mayores del mundo) nos debe hacer recapacitar y obtener una conclusión que ya deberíamos tener bien clara: “lo barato suele salir caro”.

Con la salud no se debe jugar y para cuidarla bien hace falta invertir cierto dinero ya que la calidad se paga. Las dos cosas no son compatibles: no podemos pretender recibir los mejores servicios bucodentales pagando una cantidad mínima. Hablamos de tratamientos que cuestan bastante dinero porque los materiales empleados así lo exigen, además de que hay que pagar la maquinaría empleada, el local utilizado y, sobre todo, a los profesionales que ejecutan este tipo de servicios.

Cuando se recorta mucho el precio de los tratamientos y productos dentales, también se está recortando la calidad de los mismos, los controles de sanidad, la mano especializada, el tiempo que se le dedica a cada paciente y, en general, los recursos que se emplean para tratar a cada persona, con los problemas que este hecho puede causar.

En el caso de los pacientes estafados por el grupo iDental, no hablamos sólo de una cuestión de dinero perdido sino también, en muchos casos, de problemas de salud bastante graves. De hecho, el Defensor del Paciente ha recomendado a todos los afectados por este escándalo que se realicen pruebas de detección del VIH, hepatitis C y de otras enfermedades infecciosas puesto que se han detectado fallos considerables en la esterilización del instrumental utilizado por estas clínicas, así como la presencia de abundante material caducado.

Ya hemos hablado en numerosos artículos de lo importante que es cuidar nuestra salud bucodental ya que los dientes, la boca y todo lo que tiene que ver con ésta es fundamental para mantener una salud “de hierro”, por aquí pueden venirnos numerosas infecciones y enfermedades y, por tanto, como suele rezar el dicho popular: “más vale prevenir que curar”.

Acude a profesionales de confianza, a clínicas dentales de contrastada experiencia y con una reputación impecable, no te dejes embaucar por eslóganes engañosos ni por precios sumamente atractivos: la calidad tiene un precio y si te ofrecen un tratamiento o un producto dental muy por debajo de su precio de mercado es que está sucediendo algún tipo de irregularidad, y ya hemos visto por donde suelen “ir los tiros”…

Tampoco hay que fiarse de subvenciones milagrosas o tomar decisiones precipitadas en las que se nos está presionando más de la cuenta para que decidamos aceptar algún tipo de financiación o producto financiero que nos permita pagar algún tipo de tratamiento dental que cueste un poco más de lo habitual. Lo mejor es aplicar el “sentido común” y no hacer nada de lo que nos podamos arrepentir.

En temas de salud lo barato siempre sale caro, no existen las “marcas blancas” o al menos éstas no nos garantizan siempre un mínimo de calidad, no existen las rebajas o los descuentos milagrosos, se puede recortar un poco los precios de algún tratamiento o producto concreto, como hacemos con las promociones mensuales de la Clínica Dental Cuadrado pero siempre con un orden y una lógica, no podemos ofrecer “duros a pesetas”, eso lo debe de entender todo el mundo.

En nuestra clínica encontrarás profesionales de confianza, una atención impecable, respetando los tiempos de espera pactados con los pacientes y empleando siempre los mejores medios a nuestra disposición para ofrecerles a nuestros clientes siempre resultados 100% óptimos. Ese es nuestro compromiso, nuestra máxima garantía.

Todos nuestros tratamientos están personalizados al máximo, se adaptan a las necesidades concretas de nuestros pacientes y utilizan materiales y aparatología de primera calidad. Buen ejemplo de ello lo encontramos en nuestras prótesis removibles, en las que os ofrecemos por escrito 5 años de garantía, o en nuestras coronas sobre implantes dentales, en las que os ofrecemos hasta 10 años de garantía.

No lo dudes: la Clínica Dental Cuadrado es una clínica en la que puedes confiar. Visítanos en Getafe y en Móstoles y compruébalo por ti mismo, nuestros pacientes son nuestra mejor garantía y ellos hablan maravillas sobre nosotros. Por algo será. ¡Te esperamos con los brazos abiertos!