Hace unos días publicamos un post en donde realizábamos una pequeña comparación entre dos de los sistemas de ortodoncias más empleados en la actualidad, el sistema de brackets y Invisalign, el sistema creado por la empresa Align Technology.

Sin ánimo de decantarnos por una opción u otra, vimos que Invisalign poseía una serie de características que los sistemas clásicos de brackets no poseen y que, en el caso de muchos pacientes, marcan la diferencia a la hora de elegir una u otra.

Esta semana continuamos justo por donde lo dejamos la última vez y vamos a seguir viendo alguna de las claves que diferencian a Invisalign de otras ortodoncias de brackets y que la han convertido en una de las ortodoncias más demandadas del momento.

¿Qué tiene Invisalign que no tengan los brackets?

Podemos empezar destacando una de las cualidades que más fama le ha proporcionado a Invisalign: su invisibilidad. Si bien es cierto que el apelativo de “ortodoncia invisible” puede sonar un poco exagerado, lo cierto es que los “aligners” proporcionados en este sistema son totalmente transparentes y realmente discretos.

Además de disfrutar de un sistema de ortodoncia que permite alinear tus dientes con máxima discreción, este sistema también permite al paciente cepillarse los dientes e, incluso, emplear hilo dental con total normalidad. De este modo, no se ve perjudicada la higiene dental y la salud periodontal de la persona que lleva puesta la ortodoncia.

Al contrario que otros sistemas de ortodoncia (incluidos algunos sistemas de brackets), Invisalign está fabricado con materiales plásticos de última generación, realmente suaves y cómodos de llevar. ¡Se acabaron las molestias!

El tiempo, un bien muy preciado

Pero, sin duda alguna, una de las características que más valoran las personas que se decantan por Invisalign a la hora de alinear sus dientes es el hecho de que apenas necesita mantenimiento. Con este sistema, el paciente reduce considerablemente la cantidad y la frecuencia de las visitas que tiene que realizar a su dentista de confianza.

Para personas con agendas realmente ocupadas, esta característica es fundamental. La frecuencia de visitas al dentistas suele estar en torno a 6-8 semanas cuando se sigue el tratamiento Invisalign, al contrario de otras ortodoncias en los que se puede estar visitando al dentista cada 15 días fácilmente.

Ya ves que si buscas discreción, máxima comodidad y ahorrar el máximo tiempo posible, te recomendaríamos elegir aligners transparentes, elegir Invisalign. Contacta con Clínica Dental Cuadrado y te ayudaremos a conseguir tu propia ortodoncia invisible.